Pedro Páramo - Juan Rulfo

“Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo…” es la forma en que Juan Rulfo inicia escribiendo uno de los libros más importantes y representativos de la literatura mexicana, además de ser su primer novela y quizá la más significativa para su brillante carrera.

Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno, mejor conocido como Juan Rulfo, fue un escritor, guionista y fotógrafo mexicano, considerado como uno de los autores más ilustres que ha dado México, siendo por ello uno de los mexicanos más célebres del siglo XX, más allá de lo que su nombre significa para las letras. Asimismo, es uno de los máximos exponentes del movimiento literario denominado “realismo mágico”, del que también destacan figuras como la de Gabriel García Márquez, Julio Cortázar e Isabel Allende, por señalar algunas.

Es por ello, que al hablar de Juan Rulfo y sus obras, hacemos referencia a un escritor cuyo trabajo es imprescindible para adentrarse en la literatura mexicana. Pese a que ‘Pedro Páramo’ es con justa razón el ejemplar con el que más se le identifica, de igual manera es autor de títulos como: El Llano en Llamas, “Macario”, “El Gallo de Oro” y “¡Diles que no me Maten!”.

Para el caso de ‘Pedro Páramo’, es necesario mencionar que fue publicado por primera vez en 1955, sin embargo, es tanta su valía, que sigue siendo uno de los textos más relevantes no solo en México, sino de habla hispana, que a pesar del tiempo transcurrido, aún sigue sorprendiendo gratamente a lectores de todo el mundo. Entonces, hablar de ‘Pedro Páramo’ es entender que hacemos referencia a una joya de la literatura universal, que incluso recibió grandes críticas de otros autores de renombre como Jorge Luis Borges y Gabriel García Márquez, por citar unos cuantos.

¿Qué podemos esperar entonces de ‘Pedro Páramo’?

La historia comienza a partir de la voz narrativa de Juan Preciado, personaje al que observamos prometiendo a su madre Dolores en su lecho de muerte, que irá a ver a su padre, Pedro Páramo. Es por dicha promesa que Juan se dirige a Comala, encontrándose en el paso con un arriero llamado Abundio, que tras platicar con él, sorpresivamente le confiesa también ser hijo de Pedro Páramo. Ambos, al tener el mismo destino continúan juntos su camino, siendo este el primer acercamiento de Juan en la búsqueda de su padre.

Con todo eso, el arribo a Comala es objeto de gran desconcierto para Juan, ya que la descripción que le habían hecho del pueblo es una totalmente distinta a la que llega a apreciar, discrepando totalmente de las memorias que su madre tenía de aquel sitio y que le había transmitido con anterioridad. En lugar de presentársele como un pueblo con vida, Juan lo reconoce como un paraje abandonado y con síntomas de descuido, percatándose a la par de cierta extrañeza que ronda en las personas que se van cruzando en su camino.

De lo anterior, que Juan descubrirá poco a poco que Comala es un pueblo en el que la vida y la muerte llegan a mezclarse, existiendo únicamente una delgada línea que las separa. Esto, mientras intenta dar respuesta a preguntas que no termina por resolver y que le llevarán a conocer quién fue la persona detrás del nombre de Pedro Páramo.

De este modo, el libro en cuanto a su estructura cuenta con saltos temporales que podrían llegar a ser confusos para el lector, no obstante, es precisamente esa estructura la que hace que el libro sea tan bueno y le da ese toque tan particular que posee y le caracteriza. A su vez, la narrativa se repartirá progresivamente entre Juan y Pedro, conociendo en consecuencia pasajes que nos hablan del pasado de Pedro; en tanto que Juan en su presente, se adentra en el pueblo, descifrando todo aquello que lo lleve a revelar quién fue realmente su padre. Por consiguiente, entre ellos se intercambiarán los hilos que dan desarrollo a la lectura, advirtiendo adicionalmente relatos y recuerdos de los pobladores que contribuyen a la construcción de una misteriosa historia, tornándose maravilloso descubrir las voces de toda una población.

Es así como se presenta el argumento que seguirá ‘Pedro Páramo’, novela que retrata una sociedad y un entorno en el que los ecos, lugares y personajes son lo que conjuntamente dan identidad al poblado de Comala que para tal efecto confecciona Rulfo, enalteciendo así el que hoy en día es un ejemplar cumbre e imprescindible de la cultura mexicana.

Como conclusión, podría referir que si bien la lectura no fue del todo sencilla, una vez que se comprende su composición y se logra seguir exitosamente, puede entenderse el por qué la obra es tan respetada y estimada. Personalmente, ‘Pedro Páramo’ fue un escrito que disfruté ampliamente y me llevó a querer leer “El Llano en Llamas” por añadidura.


¿Quieres conocer más?

Publicar un comentario

0 Comentarios