‘El Verano en que mi Madre Tuvo los Ojos Verdes’: una introspección hacia los vínculos fundamentales
¿Por qué leí este libro?
Personalmente, uno de mis propósitos de lectura para este año ha sido acercarme a obras más profundas, capaces de resonar en la parte más sensible, tanto como lector y persona. En otras ocasiones, experiencias con libros de contenido similar han sido sumamente enriquecedoras. Por eso, ¿qué mejor que una historia que aborda un vínculo tan fundamental en la vida de cualquier ser humano? Solo que, en este caso, la narrativa prometía retratar la relación entre un hijo y su madre lejos de cualquier ideal.
Sobre la autora
Nacida en 1978, Tatiana Țîbuleac es una autora y periodista de origen moldavo que, a lo largo de su carrera, ha sido galardonada con diversos reconocimientos que destacan su prosa caracterizada por explorar los aspectos más recónditos de la esencia humana. Después de trabajar como periodista en Moldavia, Tatiana se trasladó a París, donde iniciaría su trayectoria en la literatura.
Entre sus obras más importantes se encuentran títulos como: “El Jardín de Vidrio” y ‘El Verano en que mi Madre Tuvo los Ojos Verdes’. Este último, el ejemplar que posiblemente ha dado mayor notoriedad a su faceta como escritora a nivel internacional, acercando a lectores de todo el mundo a sus publicaciones.
En cuanto al trabajo de Tatiana, puedo decir que es una autora que desconocía, aunque su nombre lo había escuchado en reiteradas ocasiones, sobre todo en lo que respecta a ‘El Verano en que mi Madre Tuvo los Ojos Verdes’, su novela más popular y apreciada. Sobre esta, había leído en diferentes espacios críticas y opiniones que coincidían al enaltecer la brillante redacción presente en cada página, abordando un argumento que, desde lo general, aparece como una propuesta emocionalmente intensa. Esto, dado que se describe la parte negativa de una relación tan significativa en la vida de toda persona como lo es la de una madre con su hijo y viceversa. Por esta razón, su lectura era una experiencia que no podía dejar escapar y que ansiaba comenzar a leer.
Análisis
De este modo, en 2017 Tatiana publicó ‘El Verano en que mi Madre Tuvo los Ojos Verdes’, una historia con una carga emocional poderosa desde la perspectiva de un protagonista profundamente herido y marcado por la complicada relación que sostuvo con su madre, sumado a una vida definida por pérdidas y ausencias, en la que pese a que su madre formaba parte de su mundo, lo hizo sin fungir como la figura materna que durante mucho tiempo necesitó.
En ese sentido, Aleksy es un pintor que atraviesa un bloqueo artístico, por lo que decide ir a terapia. Ahí, su psiquiatra lo lleva a hablar de su pasado y, específicamente, a relatar las memorias que mantiene de su madre, quien, desde el fallecimiento de su hija —y hermana de Aleksy—, Mika, lo condujo a una relación de rechazo y distanciamiento que influyó de manera negativa y dolorosa en su formación y desarrollo, creando un odio desmedido hacia ella y hacia la imagen que representó, o mejor dicho, que dejó de representar desde su infancia.
A medida que transcurren los recuerdos de Aleksy sobre su madre, y nos adentramos en el sentir que cada situación cercana a ella le producía, identificamos una mezcla de apatía y repugnancia provocada por los instantes en que la buscó y solo recibió desdén, lo cual terminó por romper los últimos atisbos de cariño y respeto por la persona que lo vio nacer.
La narrativa sigue esta tendencia hasta que, llegado el verano en que Aleksy planeaba un viaje con sus amigos, su madre lo convence de pasar las vacaciones con ella en un pequeño poblado. Aleksy acepta, motivado por el acuerdo al que llega con su madre, quien le promete un intercambio a su beneficio, más que por el hecho de tener una intención genuina de pasar los días al lado de un ser que aborrece. Así, se suceden semanas en las que la relación madre-hijo sufre una considerable evolución, en la que el tiempo se convierte en el enemigo más cruel de ambos, dispuesto a arrebatarles aquello que nunca tuvieron.
Entonces, la obra nos permite, desde la visión de Aleksy, conocer a su madre en dos etapas: cuando el vínculo entre ambos estaba peor que nunca y cuando, al pasar un verano juntos, aparece el lado más humano y sensible de Aleksy.
Bajo este contexto, Tatiana Țîbuleac nos regala un testimonio devastador de un hombre que, desde niño, esperó muchas veces la atención de una madre que lo hizo sentirse repudiado y desplazado, hasta que la relación se fracturó, dejándolos a ambos en un entorno solitario y de resentimiento, con cientos de recuerdos amargos.
Mi opinión
Por lo anterior, puedo decir con toda seguridad que ‘El Verano en que mi Madre Tuvo los Ojos Verdes’ es una de las novelas más punzantes que he leído. Cada página y cada palabra de Aleksy nos lleva a descubrir la consecuencia de varias pérdidas, dentro de las cuales la más significativa y dolorosa fue la de su madre; no porque hubiera fallecido, sino por la descomposición de la relación madre-hijo que una cadena de acontecimientos provocó hasta causarle daños irreversibles.
A mi forma de percibirlo, no hace falta haber experimentado una situación similar para resentir cada palabra y cada gesto, tanto los que ocurrieron, como los que no llegaron cuando debieron hacerlo, lo que indudablemente nos deja una valiosa lección acerca del tipo de persona, madre o hijo -según sea el caso-, que cada quien pretende ser.
¿Vale la pena leerlo?
Desde mi perspectiva, ‘El Verano en que mi Madre Tuvo los Ojos Verdes’ no solo es un libro cien por ciento recomendable, sino también una historia potente que invita al lector a reflexionar sobre los lazos afectivos que mantiene o que ha perdido con las personas más cercanas y queridas, y a valorar cada momento compartido, así como a ponderar toda posibilidad de una reconciliación en vínculos tan vitales, mientras aún haya oportunidad.
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4 Comentarios
hola!
ResponderBorraracabo de dar con tu blog y ya te sigo ^^ te espero en xingtraducciones.blogspot.com
la lectura no la conocía, no suena tan de mi estilo pero no la descarto del todo :)
saludos :D
Hola, Xing.
Borrar¡Muchas gracias!
Claro que si, me paso por tu blog.
Podrías darle una oportunidad. ;)
Me gustó mucho el análisis que haces sobre el libro: El verano que mi madre tuvo los ojos verdes. Voy a leer el libro completo.
ResponderBorrar¡Hola!
BorrarQue bueno que te gustó. Te lo recomiendo para un rato libre o para una lectura de fin de semana.
¡Gracias por leerme!
Saludos.